ESTILO
LUXURY
Monica Luna
13 ago 2025
El Gran Premio de México de Fórmula 1 ha trascendido su rol como evento deportivo para consolidarse como un fenómeno económico y cultural de primer nivel. Desde su regreso en 2015, el evento ha generado una derrama económica acumulada superior a los 137 mil millones de pesos, con un crecimiento anual sostenido que lo posiciona como uno de los más rentables del calendario internacional de la F1.
Impacto económico y crecimiento sostenido
En 2024, el Gran Premio de México reportó una derrama económica de 19,550 millones de pesos, lo que representa un incremento del 13.8% respecto al año anterior. Este crecimiento refleja la consolidación del evento como un motor económico clave para la Ciudad de México y el país en general. Sectores como el turismo, la hotelería, el transporte, la gastronomía y el entretenimiento se han visto directamente beneficiados, con la creación de más de 82 mil empleos directos y una significativa aportación a las arcas públicas .
Un evento de lujo y exclusividad
Más allá de la pista, el Gran Premio de México se ha convertido en un escaparate de lujo y estilo de vida. Experiencias como House 44, una suite exclusiva creada por Soho House en colaboración con Lewis Hamilton y el F1 Paddock Club, ofrecen a los asistentes una hospitalidad de primer nivel, fusionando la emoción de la F1 con el confort y la exclusividad de marcas de renombre.
Un referente cultural y mediático
El evento no solo atrae a aficionados del automovilismo, sino también a celebridades y figuras internacionales, consolidándose como un punto de encuentro para el jet set global. La cobertura mediática y la exposición internacional han elevado al Gran Premio de México a la categoría de evento cultural de alto perfil, comparable con otros grandes premios como los de Mónaco o Abu Dabi.
El Gran Premio de México ha logrado fusionar la pasión por el automovilismo con el lujo, la exclusividad y el dinamismo económico, convirtiéndose en un evento emblemático que trasciende las fronteras del deporte. Su éxito no solo se mide en cifras económicas, sino también en su capacidad para posicionar a México como un destino de clase mundial en el ámbito del entretenimiento y el estilo de vida.